Roberto Ampuero vuelve a deleitarnos con una novela que nos ilustra las heridas abiertas que dejó el régimen comunista en la Alemania Oriental, creado post Segunda Guerra Mundial, y que terminaría con la caída del Muro de Berlín y la posterior reunificación alemana, desde la perspectiva de tres personajes. La narración se centra en los últimos meses de vida del otrora líder de la República Democrática Alemana (RDA) y encargado de la construcción del Muro que dividió a los alemanes y dejó centenas de víctimas que intentaron huir del estado socialista, Erich Honecker. Estos transcurren en Santiago, la capital de Chile, tras ser dejado en libertad por la justicia alemana por razones humanitarias. Honecker, dogmático hasta la médula de la ideología marxista, añora un país que ya no existe, justificando siempre sus actuaciones, eso sí, con una gran culpa por haber permitido el fin del comunismo en Alemania. Destaco acá el gran trabajo de investigación del autor, quien además de mostrar un Honecker íntimo, nos aporta muchos datos interesantes sobre la vida del dictador. También es notable la serie de sueños que tiene el jerarca defenestrado con personajes de la talla de Castro, Allende, Stalin y el mismísimo Marx. Los otros dos personajes que cuentan esta esta entretenida historia son Patricio Dupré, traductor de Honecker en Santiago y Valentina Bode, alemana que viaja a Santiago a entrevistar al ex jerarca. Ambos protagonizaron una truncada historia de amor que terminó cuando Patricio salió de la RDA hacia Occidente y Valentina no obtuvo la autorización del régimen para salir. Ambas víctimas de la maquinaria estatal que lideró Honecker, no solamente se encuentran con él, reviviendo recuerdos difíciles, sino también se enfrentan al otro, al que alguna vez fue su amor. Las reflexiones de los tres personajes tras el paso de los años; los secretos y dolores que sufrieron en sus vidas; el reencuentro de dos ex amantes; el encuentro con el responsable de tanto dolor; y los reproches de un líder comunista depuesto, son ingredientes quizás disímiles. Pero Ampuero logra conjugarlos de manera magistral, haciendo de “Nunca volveré a Berlín” una novela cautivante, entretenida y que nos invita también a la reflexión. A continuación, revisa la entrevista completa que nos concedió el escritor nacional sobre esta nueva publicación.
Tras la exitosa trilogía de novelas sobre la ocupación chilena del Gulumapu ( ver acá la nota), el escritor chileno Guillermo Parvex nos vuelve a ofrecer una novela histórica de muy buen nivel, que narra nuevos acontecimientos de la historia chilena del siglo XIX; esta vez, la Guerra del Pacífico, que enfrentó a Chile contra la alianza entre Perú y Bolivia entre los años 1879 y 1884. “Soldado por circunstancia. Un profesor en el asalto y toma del Morro de Arica”, nos traslada por la primera mitad del conflicto armada, específicamente desde su inicio hasta la captura de Arica, tras la proeza militar de los hombres comandados por el coronel Pedro Lagos. El personaje principal de esta novela es Benjamín Valdés, un profesor de la Escuela de Preceptores de Santiago, quien es llamado a enrolarse en el Ejército de Chile y partir a la guerra, específicamente en el Cuarto de Línea, debiendo abandonar sus labores como profesor de profesores y, lo más importante, a su joven mujer embarazada. Benjamín, un tipo culto y bien formado, afronta con decisión e inteligencia las distintas misiones que le son encomendadas durante su participación en el conflicto, pero al mismo tiempo con una mirada muy crítica de la guerra. Parvex supo construir, exitosamente a mi parecer, un personaje muy humano, en el cual tiene cabida el miedo, el amor a su familia y la vocación por su profesión, el espíritu crítico y la disciplina necesaria para poder cumplir con sus deberes militares. Por otra parte, “Soldado por circunstancia” es una obra en la cual abundan datos precisos y valiosos para comprender, casi de manera fotográfica, el contexto histórico. Algo que, por cierto, es algo habitual (y en buena hora) en los trabajos de Parvex. Además de un relato nutrido y detallado de los acontecimientos de la guerra, también el autor nos describe lugares y costumbres del Chile de la segunda mitad del siglo XIX. Es una grata sorpresa para el lector conocer con detalles, y dentro de una aventura entretenida, cuestiones a veces desconocidas como barrios de ciudades, comidas y celebraciones. Algo muy destacable de esta novela, es la incorporación a ella, de manera siempre muy atingente, de personas que no combatieron directamente en el conflicto, pero que realizaron labores esenciales para lograr los objetivos; religiosos, cantineras, médicos y espías tienen su espacio también en esta historia, lo que la aleja de ser un simple relato bélico, muy por el contrario, nos muestra la guerra desde varias de sus múltiples dimensiones. Otro punto a su favor. Pienso que “Soldado por circunstancia” cumple con las exigencias de una buena novela histórica: nos cuenta la historia de manera certera y a la vez entretenida. Es una excelente opción para ser leída tanto por personas que desconocen el tema y quieran introducirse en él, como también para quienes ya tienen algunos conocimientos y quieren agregar algunos más. En Palco tuvo la oportunidad de conversar con don Guillermo Parvex, en una entrevista que puedes ver completa a continuación, y en donde profundizamos algunos de los temas que toca el libro. No te la pierdas!!!
La miniserie de dos capítulos producida por la RAI en 2006 (en italiano Il sorriso di Dio) nos relata la biografía de Albino Luciani , más conocido como el papa Juan Pablo I, quien comandó la Iglesia Católica Romana desde el 26 de agosto de 1978 hasta su muerte, acaecida sólo 33 día después. Fue dirigida esta producción por Giorgio Capitani y protagonizada por el actor Neri Marcoré. A través de la conversación de Luciani con una anciana Lucía, una de las niñas de Fátima, la miniserie recorre la vida del que sería el protagonista de un breve, pero transformador papado en la segunda mitad del siglo XX, destacándose siempre por su humildad, servicio al prójimo y un carisma sin grandes alardes, basado más en los hechos que en las palabras. Su historia nos cuenta la vida de un hombre que, a pesar de sus limitaciones de salud que lo aquejaron desde la más tempranísima edad y haber sufrido la Segunda Guerra Mundial, mantuvo firmes sus convicciones y siempre tuvo como centro de todo el hacer el bien a los demás. Por ejemplo, durante el conflicto bélico ayudo a judíos y a cristianos perseguidos, incluso poniendo en riesgo su vida. Su cercanía, pero también su inteligencia lo llevaron, a pesar de sus reservas, a encumbrarse en cargos de relevancia dentro de la Iglesia, hasta alcanzar el papado. Tras su muerte, a los 65 años, desde el 2022 es considerado Beato de la Iglesia. La Semana Santa es una buena oportunidad para conocer más a este personaje contemporáneo, en especial su forma de llevar adelante su servicio al prójimo, el cual quizás no tuvo la relevancia de un Juan Pablo II, su sucesor, pero que encarna absolutamente los valores cristianos. La puedes encontrar en español en Youtube.
El mundo de la música metal ha sido sorprendido por una grata sorpresa: Slayer ha anunciado su regreso a los escenarios tras una ausencia de casi 5 años. Uno de los cuatro grandes del thrash metal (honor que comparte con Megadeth, Metallica y Anthrax) confirmó hoy a través de sus redes sociales que participarán el 22 de septiembre de este año en el Riot Fest de Chicago y el 27 del mismo mes en Louisville, en el Louder than Fest. Para los fanáticos de Slayer este anuncio ha causado felicidad y sorpresa. En primer lugar, queda abierta la posibilidad de un regreso más estable de la banda, que si los astros lo permiten, termine con la agrupación fundada en 1981 y compuesta por Tom Araya (voz y bajo), Kerry King (guitarra), Gary Holt (guitarra) y Paul Bostaph (batería) en tierras nacionales nuevamente. En segundo lugar, sorpresa, ya que el anuncio se da a pocos días de declaraciones Kerry King en el contexto de la promoción de su nuevo trabajo (Idle Hands), de su proyecto homónimo que cuenta con la participación de Paul Bostaph; Kyle Sanders en el bajo; el ex Machine Head Phil Demmel en la guitarra; y de Mark Osegueda, la legendaria voz de Death Angel. Además, el propio King afirmó que no había vuelto a tener ningún tipo de contacto con el chileno Tom Araya desde el cierre del “Final World Tour” acaecido en noviembre del 2019. Al parecer la distancia con el viñamarino y evertoniano Tom Araya es cosa del pasado, al menos en esta pasada. El retorno de Slayer a las pistas es una buena noticia para los fans de tan icónica banda, la cual se presentó por última vez en Chile precisamente en el Sporting Club (junto a Anthrax) de la ciudad natal de Araya, lo cual parecía cerrar el círculo que hoy podría comenzar a abrirse para el beneplácito de todos aquellos que disfrutan de sus temas.
Hace más de una década, la gran mayoría de los chilenos conocíamos poco de Venezuela. Si le preguntaban al ciudadano de a pie, seguramente hubiese nombrado sus clásicas teleseries, exitosos cantantes, las “misses” y la palabra “chévere”. También como olvidar la caída estrepitosa de 'Cheíto' (actor Manuel Carrillo) en el programa Siempre Lunes el año 1989… Pero de sus platos y sándwiches típicos poco sabíamos, hasta ahora. Para nadie es un misterio que desde un tiempo a esta parte se han multiplicado locales y restaurantes de comida venezolana en Chile. Y la verdad, la gastronomía del país del norte de nuestro subcontinente ofrece productos que se caracterizan por utilizar diversos ingredientes, todos ellos ofrecidos en un punto en que realzan sus sabores. Una especie de mestizaje culinario que abraza las costumbres de los nativos precoloniales, la conquista española y la inmigración en épocas más contemporáneas. Además hacer notar que, generalmente, son muy buenos para utilizar salsas preparadas con sabores fuertes (ajo, picante, ciboulette, entre otros), lo que lleva irremediablemente, al probar alguno de sus platos o sándwich tradicionales, a experimentar una auténtica explosión de sabor. Quizás una de los alimentos más reconocidos es la Arepa, hecha con masa de maíz y de aspecto redondo y plano, que también es muy consumida en la vecina Colombia. Por su parte, la Cachapa, que también es a base maíz (en este caso dulce) y de origen precolombino, es un plato típico venezolano muy reconocido que generalmente se presenta con una gran cantidad de queso (de mano y llanero) y, para hacerlo más contundente aún, con carne, ya sea mechada o de cochino (cerdo) frito. En materia de comida callejera cuentan con el Perro Caliente, el primo hermano de nuestro querido y siempre necesario completo, del panchito argentino y del hot dog típico de EE.UU. En el caso venezolano, la salchicha en un pan alargado puede llevar una infinidad de ingredientes, como queso, tocineta (tocino), maíz, cebolla, etc. Suelen comerlo con varios tipos de salsas a la vez y los venden mucho en carritos callejeros. El otro estandarte del Street Food venezolano es el Pepito, el cual también es un pan alargado, generalmente más duro que el del perro caliente, que alberga en su interior uno, dos o infinitos tipos de carne (pollo, res, cerdo, tocino), con queso llanero, verduras y la exquisita tajada (lámina de plátano frito), entre otros. El límite es lo que tengas a mano. Finalmente, el Pabellón Criollo es quizás, el plato más tradicional de la comida venezolana, el platillo nacional. Es una preparación que combina diversos ingredientes y que en su presentación se muestra con una variedad de colores: arroz blanco, carne mechada, caraotas (poroto negro), tajadas de plátano fritas. Por supuesto existen versiones que agregan otros ingredientes a este multiplato, como puede ser queso o huevo frito. Si quieres conocer un poco más sobre estas exquisiteces y cumplir así con la máxima de que “la comida entra por los ojos”, te invito a ver el siguiente video donde mostramos sabrosos ejemplos de la comida venezolana. No te pierdas un nuevo capítulo de En Palco Condimenta, en el que visitamos algunos locales en Viña del Mar y Valparaíso.
Roberto Ampuero vuelve a deleitarnos con una novela que nos ilustra las heridas abiertas que dejó el régimen comunista en la Alemania Oriental, creado post Segunda Guerra Mundial, y que terminaría con la caída del Muro de Berlín y la posterior reunificación alemana, desde la perspectiva de tres personajes. La narración se centra en los últimos meses de vida del otrora líder de la República Democrática Alemana (RDA) y encargado de la construcción del Muro que dividió a los alemanes y dejó centenas de víctimas que intentaron huir del estado socialista, Erich Honecker. Estos transcurren en Santiago, la capital de Chile, tras ser dejado en libertad por la justicia alemana por razones humanitarias. Honecker, dogmático hasta la médula de la ideología marxista, añora un país que ya no existe, justificando siempre sus actuaciones, eso sí, con una gran culpa por haber permitido el fin del comunismo en Alemania. Destaco acá el gran trabajo de investigación del autor, quien además de mostrar un Honecker íntimo, nos aporta muchos datos interesantes sobre la vida del dictador. También es notable la serie de sueños que tiene el jerarca defenestrado con personajes de la talla de Castro, Allende, Stalin y el mismísimo Marx. Los otros dos personajes que cuentan esta esta entretenida historia son Patricio Dupré, traductor de Honecker en Santiago y Valentina Bode, alemana que viaja a Santiago a entrevistar al ex jerarca. Ambos protagonizaron una truncada historia de amor que terminó cuando Patricio salió de la RDA hacia Occidente y Valentina no obtuvo la autorización del régimen para salir. Ambas víctimas de la maquinaria estatal que lideró Honecker, no solamente se encuentran con él, reviviendo recuerdos difíciles, sino también se enfrentan al otro, al que alguna vez fue su amor. Las reflexiones de los tres personajes tras el paso de los años; los secretos y dolores que sufrieron en sus vidas; el reencuentro de dos ex amantes; el encuentro con el responsable de tanto dolor; y los reproches de un líder comunista depuesto, son ingredientes quizás disímiles. Pero Ampuero logra conjugarlos de manera magistral, haciendo de “Nunca volveré a Berlín” una novela cautivante, entretenida y que nos invita también a la reflexión. A continuación, revisa la entrevista completa que nos concedió el escritor nacional sobre esta nueva publicación.
Tras la exitosa trilogía de novelas sobre la ocupación chilena del Gulumapu ( ver acá la nota), el escritor chileno Guillermo Parvex nos vuelve a ofrecer una novela histórica de muy buen nivel, que narra nuevos acontecimientos de la historia chilena del siglo XIX; esta vez, la Guerra del Pacífico, que enfrentó a Chile contra la alianza entre Perú y Bolivia entre los años 1879 y 1884. “Soldado por circunstancia. Un profesor en el asalto y toma del Morro de Arica”, nos traslada por la primera mitad del conflicto armada, específicamente desde su inicio hasta la captura de Arica, tras la proeza militar de los hombres comandados por el coronel Pedro Lagos. El personaje principal de esta novela es Benjamín Valdés, un profesor de la Escuela de Preceptores de Santiago, quien es llamado a enrolarse en el Ejército de Chile y partir a la guerra, específicamente en el Cuarto de Línea, debiendo abandonar sus labores como profesor de profesores y, lo más importante, a su joven mujer embarazada. Benjamín, un tipo culto y bien formado, afronta con decisión e inteligencia las distintas misiones que le son encomendadas durante su participación en el conflicto, pero al mismo tiempo con una mirada muy crítica de la guerra. Parvex supo construir, exitosamente a mi parecer, un personaje muy humano, en el cual tiene cabida el miedo, el amor a su familia y la vocación por su profesión, el espíritu crítico y la disciplina necesaria para poder cumplir con sus deberes militares. Por otra parte, “Soldado por circunstancia” es una obra en la cual abundan datos precisos y valiosos para comprender, casi de manera fotográfica, el contexto histórico. Algo que, por cierto, es algo habitual (y en buena hora) en los trabajos de Parvex. Además de un relato nutrido y detallado de los acontecimientos de la guerra, también el autor nos describe lugares y costumbres del Chile de la segunda mitad del siglo XIX. Es una grata sorpresa para el lector conocer con detalles, y dentro de una aventura entretenida, cuestiones a veces desconocidas como barrios de ciudades, comidas y celebraciones. Algo muy destacable de esta novela, es la incorporación a ella, de manera siempre muy atingente, de personas que no combatieron directamente en el conflicto, pero que realizaron labores esenciales para lograr los objetivos; religiosos, cantineras, médicos y espías tienen su espacio también en esta historia, lo que la aleja de ser un simple relato bélico, muy por el contrario, nos muestra la guerra desde varias de sus múltiples dimensiones. Otro punto a su favor. Pienso que “Soldado por circunstancia” cumple con las exigencias de una buena novela histórica: nos cuenta la historia de manera certera y a la vez entretenida. Es una excelente opción para ser leída tanto por personas que desconocen el tema y quieran introducirse en él, como también para quienes ya tienen algunos conocimientos y quieren agregar algunos más. En Palco tuvo la oportunidad de conversar con don Guillermo Parvex, en una entrevista que puedes ver completa a continuación, y en donde profundizamos algunos de los temas que toca el libro. No te la pierdas!!!
La miniserie de dos capítulos producida por la RAI en 2006 (en italiano Il sorriso di Dio) nos relata la biografía de Albino Luciani , más conocido como el papa Juan Pablo I, quien comandó la Iglesia Católica Romana desde el 26 de agosto de 1978 hasta su muerte, acaecida sólo 33 día después. Fue dirigida esta producción por Giorgio Capitani y protagonizada por el actor Neri Marcoré. A través de la conversación de Luciani con una anciana Lucía, una de las niñas de Fátima, la miniserie recorre la vida del que sería el protagonista de un breve, pero transformador papado en la segunda mitad del siglo XX, destacándose siempre por su humildad, servicio al prójimo y un carisma sin grandes alardes, basado más en los hechos que en las palabras. Su historia nos cuenta la vida de un hombre que, a pesar de sus limitaciones de salud que lo aquejaron desde la más tempranísima edad y haber sufrido la Segunda Guerra Mundial, mantuvo firmes sus convicciones y siempre tuvo como centro de todo el hacer el bien a los demás. Por ejemplo, durante el conflicto bélico ayudo a judíos y a cristianos perseguidos, incluso poniendo en riesgo su vida. Su cercanía, pero también su inteligencia lo llevaron, a pesar de sus reservas, a encumbrarse en cargos de relevancia dentro de la Iglesia, hasta alcanzar el papado. Tras su muerte, a los 65 años, desde el 2022 es considerado Beato de la Iglesia. La Semana Santa es una buena oportunidad para conocer más a este personaje contemporáneo, en especial su forma de llevar adelante su servicio al prójimo, el cual quizás no tuvo la relevancia de un Juan Pablo II, su sucesor, pero que encarna absolutamente los valores cristianos. La puedes encontrar en español en Youtube.
El mundo de la música metal ha sido sorprendido por una grata sorpresa: Slayer ha anunciado su regreso a los escenarios tras una ausencia de casi 5 años. Uno de los cuatro grandes del thrash metal (honor que comparte con Megadeth, Metallica y Anthrax) confirmó hoy a través de sus redes sociales que participarán el 22 de septiembre de este año en el Riot Fest de Chicago y el 27 del mismo mes en Louisville, en el Louder than Fest. Para los fanáticos de Slayer este anuncio ha causado felicidad y sorpresa. En primer lugar, queda abierta la posibilidad de un regreso más estable de la banda, que si los astros lo permiten, termine con la agrupación fundada en 1981 y compuesta por Tom Araya (voz y bajo), Kerry King (guitarra), Gary Holt (guitarra) y Paul Bostaph (batería) en tierras nacionales nuevamente. En segundo lugar, sorpresa, ya que el anuncio se da a pocos días de declaraciones Kerry King en el contexto de la promoción de su nuevo trabajo (Idle Hands), de su proyecto homónimo que cuenta con la participación de Paul Bostaph; Kyle Sanders en el bajo; el ex Machine Head Phil Demmel en la guitarra; y de Mark Osegueda, la legendaria voz de Death Angel. Además, el propio King afirmó que no había vuelto a tener ningún tipo de contacto con el chileno Tom Araya desde el cierre del “Final World Tour” acaecido en noviembre del 2019. Al parecer la distancia con el viñamarino y evertoniano Tom Araya es cosa del pasado, al menos en esta pasada. El retorno de Slayer a las pistas es una buena noticia para los fans de tan icónica banda, la cual se presentó por última vez en Chile precisamente en el Sporting Club (junto a Anthrax) de la ciudad natal de Araya, lo cual parecía cerrar el círculo que hoy podría comenzar a abrirse para el beneplácito de todos aquellos que disfrutan de sus temas.
Hace más de una década, la gran mayoría de los chilenos conocíamos poco de Venezuela. Si le preguntaban al ciudadano de a pie, seguramente hubiese nombrado sus clásicas teleseries, exitosos cantantes, las “misses” y la palabra “chévere”. También como olvidar la caída estrepitosa de 'Cheíto' (actor Manuel Carrillo) en el programa Siempre Lunes el año 1989… Pero de sus platos y sándwiches típicos poco sabíamos, hasta ahora. Para nadie es un misterio que desde un tiempo a esta parte se han multiplicado locales y restaurantes de comida venezolana en Chile. Y la verdad, la gastronomía del país del norte de nuestro subcontinente ofrece productos que se caracterizan por utilizar diversos ingredientes, todos ellos ofrecidos en un punto en que realzan sus sabores. Una especie de mestizaje culinario que abraza las costumbres de los nativos precoloniales, la conquista española y la inmigración en épocas más contemporáneas. Además hacer notar que, generalmente, son muy buenos para utilizar salsas preparadas con sabores fuertes (ajo, picante, ciboulette, entre otros), lo que lleva irremediablemente, al probar alguno de sus platos o sándwich tradicionales, a experimentar una auténtica explosión de sabor. Quizás una de los alimentos más reconocidos es la Arepa, hecha con masa de maíz y de aspecto redondo y plano, que también es muy consumida en la vecina Colombia. Por su parte, la Cachapa, que también es a base maíz (en este caso dulce) y de origen precolombino, es un plato típico venezolano muy reconocido que generalmente se presenta con una gran cantidad de queso (de mano y llanero) y, para hacerlo más contundente aún, con carne, ya sea mechada o de cochino (cerdo) frito. En materia de comida callejera cuentan con el Perro Caliente, el primo hermano de nuestro querido y siempre necesario completo, del panchito argentino y del hot dog típico de EE.UU. En el caso venezolano, la salchicha en un pan alargado puede llevar una infinidad de ingredientes, como queso, tocineta (tocino), maíz, cebolla, etc. Suelen comerlo con varios tipos de salsas a la vez y los venden mucho en carritos callejeros. El otro estandarte del Street Food venezolano es el Pepito, el cual también es un pan alargado, generalmente más duro que el del perro caliente, que alberga en su interior uno, dos o infinitos tipos de carne (pollo, res, cerdo, tocino), con queso llanero, verduras y la exquisita tajada (lámina de plátano frito), entre otros. El límite es lo que tengas a mano. Finalmente, el Pabellón Criollo es quizás, el plato más tradicional de la comida venezolana, el platillo nacional. Es una preparación que combina diversos ingredientes y que en su presentación se muestra con una variedad de colores: arroz blanco, carne mechada, caraotas (poroto negro), tajadas de plátano fritas. Por supuesto existen versiones que agregan otros ingredientes a este multiplato, como puede ser queso o huevo frito. Si quieres conocer un poco más sobre estas exquisiteces y cumplir así con la máxima de que “la comida entra por los ojos”, te invito a ver el siguiente video donde mostramos sabrosos ejemplos de la comida venezolana. No te pierdas un nuevo capítulo de En Palco Condimenta, en el que visitamos algunos locales en Viña del Mar y Valparaíso.