Es de noche y Augusto Góngora está acostado en su cama desorientado. En la esquina, Paulina Urrutia intenta recordarle quién es y dónde está. “Nos conocemos hace más de 20 años” le dice con profundo amor y paciencia. Él responde sorprendido, en un espacio-tiempo que prácticamente se congela. Así comienza “La Memoria Infinita”, el estremecedor e íntimo documental de Maite Alberdi. “Suelo trabajar con personas anónimas y esta vez me enfrenté a dos personas completamente distintas. Tuve que hacer el ejercicio inverso de ver cómo esta historia es universal. Qué es lo que cala hondo de ellos, porque yo hago cine para el mundo, no para Chile y ellos no son famosos para el resto”, explicó Maite Alberdi a Revista Ya. Fue el 2018, el mismo año en que el periodista hizo pública su enfermedad, cuando se inició el rodaje. Era la primera vez que Maite Alberdi tenía como protagonistas a dos personas mediáticas: por un lado a Paulina Urrutia, una destacada actriz y ex Ministra de Cultura, y por el otro a Augusto Góngora, quien por años se dedicó a reconstruir la memoria de Chile en dictadura. Pero ¿Qué tenía esta historia que fuera universal? La respuesta es simple: el amor. Esta película no es sobre el Alzheimer ni el avance de esta enfermedad, es sobre el amor y queda claro en casi 1 hora y media. “No hay una sola forma de ser pareja, ellos rompen todos los estereotipos, nunca vi un amor así en mi vida”, relata Maite Alberdi. “Si te cuento la película, piensas ´que susto, pierde la memoria´, pero para mí no se trata de susto, es entender cómo abordas las relaciones”. La grabación se extendió hasta 2022, pasó por la pandemia y eso llevó a que Paulina Urrutia tomara la cámara y empezara a registrar lo que ocurría en el confinamiento. Un hito que pese a haber podido detener la producción, agregó uno de los valores más importantes de esta cinta: la intimidad. En esa hora y media, “La Memoria Infinita” logra traspasar la pantalla, envuelve al espectador y lo involucra en el profundo amor de esta pareja, pero también en la alegría, en la tristeza y en el desgarro. “La Memoria Infinita” no es una película liviana, más bien está cargada de emocionalidad. Si bien en “El Agente Topo” se reconocen varios tintes de comedia, en este documental la ironía se entrelazan con el drama. Es de esas películas que nos dejan pensando, que nos hacen reflexionar sobre la importancia que le damos a ciertos aspectos de la vida, las relaciones, el amor incondicional por el otro, la forma de comunicarnos, la búsqueda de nuevos canales y la reconstrucción de la memoria. Algo tan importante, a 50 años del golpe de Estado. “Creo que en esta película sí hay memoria. Augusto llora por la muerte de uno de sus amigos y, no haré spoiler, pero hay un momento en que una frase que dice, nos dejó claro que ahí debía terminar la película, porque estaba relacionado a su identidad. Y yo no puedo seguir grabando a alguien que siente que su identidad ya no está”. Pasado, presente y futuro A diferencia de sus otros largometrajes (“La Once”, “Los Niños”, entre otros), esta es la primera vez que Maite Alberdi utiliza imágenes de archivo. Se puede ver parte del trabajo de Paulina Urrutia y Augusto Góngora, además de sus registros personales. Este recurso funciona perfectamente para contextualizar a los personajes en lugares donde son desconocidos. Les da universalidad y cercanía, no por nada en enero se llevó el Gran Premio del Jurado en el festival Sundance de Estados Unidos. Y si bien Maite Alberdi ha reconocido que “no todas las películas llegan al mismo lugar”, “La Memoria Infinita” podría llevarla nuevamente a los Oscar. Hoy es una de las cartas para representar a Chile en la Academia, cuenta con la distribución internacional de MTV Documentary Films y ya se estrenó de forma comercial en Estados Unidos el 11 de agosto. Un escenario muy distinto al que tuvo “El Agente Topo” durante la pandemia, donde prácticamente todo funcionó de forma online. El próximo 24 de agosto, será el turno de Chile. Un estreno que sin duda rendirá homenaje a Augusto Góngora, a 3 meses de su muerte. “¿Y Góngora pudo ver la película? No, cuando terminamos ya no estaba consciente, no tenía sentido exponerlo a ese estímulo. La Paulina le contaba y él reaccionaba. Sus amigos me dicen que le habría encantado”, concluye Maite
Hace 8 años, la vida de Paulina Urrutia y Augusto Góngora cambió para siempre. El alzheimer se hacía presente, marcando un antes y un después en esta historia de amor que comenzó hace más de 25 años. Esa compañía, el cuidado, la trayectoria profesional y el amor incondicional, es lo que resume el teaser de “La Memoria Infinita”; poco más de 40 segundos del nuevo documental de Maite Alberdi. “Lo importante es no te olvides de mí”, le pide Paulina Urrutia a Augusto Góngora. Un conmovedor adelanto de esta cinta que llegará a los cines chilenos y norteamericanos en agosto, luego de haber sido aclamada en festivales como Sundance y Berlín. “En un relato sobre el recuerdo individual y colectivo, Augusto, quien fuera un destacado periodista cultural de la televisión chilena, y Paulina, reconocida actriz y ex ministra de cultura, dialogan entre la reconstrucción de la memoria e identidad, y a la vez mantienen vivo ese amor cómplice inquebrantable”, explica el comunicado de este adelanto. “Me has regalado tantas cosas maravillosas”, le confiesa Augusto Góngora a Paulina Urrutia. Un largometraje íntimo, que registró el día a día de la pareja, el apoyo, el humor, el desafío de reinventar la forma de relacionarse entre ellos y con los otros. Puedes ver un adelanto de “La Memoria Infinita”, a continuación.
Si hay películas que deberían estar en todas las premiaciones, esta es una de ellas. Estrenada en 2021, “El ciego que no quería ver Titanic” será una de las apuestas que traerá el Mes de la Red de Salas de Cine y el Festival de Cine Europeo, antes de su estreno comercial el próximo 29 de junio. Grabada casi por completo con un solo actor en primer plano, este drama finlandés del director Temy Nikki, nos sumerge en la vida íntima de Jaakko : un hombre con esclerosis múltiple que, además de estar paralizado de la cintura hacia abajo, quedó ciego. Enclaustrado en su propio hogar, Jaakko ha sostenido conversaciones telefónicas con Sirpa, una amiga que no conoce y que también lidia con una grave enfermedad. Seducidos ambos por el gusto por el cine, Jaakko decide dejar su hogar e ir a ver a Sirpa, luego de recibir una grave noticia sobre su estado. Es aquí cuando comienza el conflicto. Además de las limitaciones obvias por su enfermedad, Jaakko descubrirá lo más miserable del ser humano: la avaricia, la delincuencia sin pudor, la discriminación. Casi como el Titanic chocando constantemente contra el iceberg, esta cinta nos somete a una experiencia intensa, de rabia, frustración e indignación; pero también nos muestra el lado resiliente del ser humano, el que a pesar de toda la adversidad, puede seguir en pie. Premiada por el público en Venecia, “El ciego que no quería ver Titanic” tendrá funciones gratuitas por el Mes de la Red de Salas de Cine desde el 15 al 22 de junio, en Antofagasta, Santiago, Coyhaique, Puerto Montt, Arica, Los Andes, San Antonio y Valdivia; y por el Festival de Cine Europeo el 16 de junio en la Universidad de Los Andes y el 27 en la Universidad de Chile. Una oportunidad única para ver este tipo de títulos, que difícilmente llegan a nuestro país como estrenos masivos en salas comerciales.
A comienzos de la década del 2000, Alejandro Amenábar nos mostraba a través del terror el drama de una mujer que, a la espera de su marido de la guerra, terminó asesinando a sus dos hijos en una solitaria mansión en la isla de Jersey. Consumida por el aislamiento, debido a una limitante enfermedad de sus hijos, la historia de esta mujer y su familia en “Los Otros” nos volvió a demostrar que este género puede ir más allá de un mero producto comercial. “Siempre le he tenido miedo a las películas de terror. Quizás por eso me interesa tanto contar historias sobre miedo, porque tengo una imaginación muy fuerte. Cuando vi Los Otros, de Alejandro Amenábar, esa fue la película que me abrió los ojos”, explica Hanna Berghold, directora de “Cría Siniestra”. “Aunque siempre había pensado que no quería ver películas de terror, vi cómo se puede contar una historia dramática en un género fantástico. Eso es algo que realmente queríamos hacer en esta película: contar una historia dramática a través del terror”, señala la realizadora; sin embargo, la vara era alta. Premiada en el festival de Sitges, en la categoría “Mejores efectos especiales”, esta cinta finlandesa -estrenada en 2022 - llegará el próximo 18 de mayo a los cines chilenos. Una oferta ideal para los amantes del horror, lo sobrenatural y las historias retorcidas, que tiene como eje principal la relación de una madre, obsesionada con mostrar una vida perfecta a través de las redes sociales, y su hija, una adolescente sometida a sus ambiciones. “Lo que realmente quería mostrar es la relación madre-hija, donde la madre ve a la hija como algo que le pertenece, para que persiga sus ambiciones y algunos sueños incumplidos”. Ambientada en un lujoso barrio finlandés, la película comienza mostrándonos a una familia perfecta, en su barrio perfecto, viviendo una vida perfecta; sin embargo, nos deja en claro que se trata de una burda fachada de esta matriarca. Es en este contexto cuando su hija Tinja comienza a revelarse. Luego de encontrar un misterioso huevo cerca de su hogar, Tinja decide cuidarlo convencida que en su interior existe vida. El resultado es predecible: un monstruo que poco a poco comienza a tomar su forma, navegando a su lado más siniestro y retorcido. La historia que nos cuenta Hanna Berghold, termina siendo una metáfora del crecimiento, emancipación y enfrentamiento de esta adolescente, dejándonos la interrogante: ¿Quién es realmente el monstruo? “Cría Siniestra” es una película que dentro de sus márgenes cumple con lo prometido, sin inflar una trama que fácilmente podría caer en una cinta más del terror comercial. No por nada ha sido elogiada por diversos medios alrededor del mundo, como Variety y Empire. ¿Logra “Cría Siniestra” igualar la vara que dejó “Los Otros”? Si bien su propósito nunca fue ese, la respuesta es no, pero es un buen ejemplo del camino que han sembrado estos referentes.
Los últimos meses han sido caóticos para Pascuala Ilabaca, una verdadera odisea como ella misma confiesa en su regreso a los escenarios tras las cuarentenas. “Logramos recuperar algunos de esos shows (que se habían caído por la pandemia) e hicimos una gira de 30 conciertos, que fue realmente una odisea, porque haber juntado tantas presentaciones en una misma gira, fue una locura. La voz dio y todo el cuerpo, pero igual fue súper agotador”. Agotador, pero estimulante a la vez, nos confiesa. Hizo un tour por Estados Unidos, Europa y Canadá, se presentó en el Festival de Jazz de Montreal ante más de 25 mil personas, el más importante en su género a nivel mundial. “Pudimos compartir con bandas que habíamos estado escuchando durante todo el año y verlos en vivo, conocerlos, eso es bien interesante para cualquiera que busque y persiga salir del país. El contacto que uno pueda hacer con otros artistas, es súper importante” , cuenta a En Palco Pascuala Ilabaca. Y pese a que su agenda no para, el próximo 27 de abril estrenará “Alegriste”, su nuevo EP del que por estos días presenta “Estocolmo”, el single que ya nos adelanta un sonido más rockero. Un poco más alejada de la música de raíz, Pascuala nos lleva a reflexionar sobre lo que realmente queremos y lo que hacemos por conseguirlo; sobre las frustraciones, el arriesgarse y lo que ello implica: ganar o perder. “El EP Alegriste es bien bipolar, como su nombre. Habla mucho de las frustraciones y también de los afectos; hay canciones muy íntimas, muy tiernas. Hay una canción que le escribí a mi gata para hacerla dormir; y también hay otras como Estocolmo, que son más densas, que hablan del manejo de las frustraciones, de cómo estamos secuestrados también por los propios límites que nos ponemos a nosotros mismos”, adelanta Pascuala Ilabaca. El Síndrome de Estocolmo “ Cómo quieres que se arregle el mundo, si tú no quieres arriesgar nada de nada”, es lo que repite una y otra vez la artista en “Estocolmo”, la canción titulada con el mismo nombre del síndrome que lleva a una víctima a desarrollar afecto positivo hacia su victimario. “El dinero podría ser nuestro secuestrador del cual estamos enamorados, pero también hay un autosecuestro, que es la estructura mental, rígida que cada uno va construyendo acerca de quién es, del rol que cumple en su familia, en su entorno” , explica la cantante y compositora chilena. “Qué podemos hacer realmente para cambiar algo que no nos gusta, si es que seguimos amarrados a la misma estructura mental, que nos hace resolver los problemas de la misma manera una y otra vez. Yo creo que sí podemos cambiar, pero para eso tenemos que pensar desde adentro que sí se puede” . Una intervención textil con las mismas prendas que la gente donó para las personas afectadas en los incendios de Valparaíso, pero que estaban inutilizables, es lo que también se puede ver en el videoclip de “Estocolmo”. Parte de una crítica más política y social que fue llevada al centro de Viña del Mar y a la zona del incendio. “Fue fuerte hacer esa instalación, porque al final como llevamos la ropa misma, que era la ropa real que la gente había donado, a la calle real e interactuar con las personas reales que estaban ahí comprando, pasó de ser un rodaje de videoclip a una acción de arte bien intensa y fuerte”. Esto es parte de los casi 5 minutos de “Estocolmo” , que ya alcanza más de 11 mil visualizaciones en Youtube. Un adelanto del EP “Alegriste”, que se suma a una serie de conciertos, incluida una gira por Estados Unidos, que mantiene ansiosa y expectante a la artista nacional. Revisa a continuación el videoclip “Estocolmo”, disfrútalo.
Es de noche y Augusto Góngora está acostado en su cama desorientado. En la esquina, Paulina Urrutia intenta recordarle quién es y dónde está. “Nos conocemos hace más de 20 años” le dice con profundo amor y paciencia. Él responde sorprendido, en un espacio-tiempo que prácticamente se congela. Así comienza “La Memoria Infinita”, el estremecedor e íntimo documental de Maite Alberdi. “Suelo trabajar con personas anónimas y esta vez me enfrenté a dos personas completamente distintas. Tuve que hacer el ejercicio inverso de ver cómo esta historia es universal. Qué es lo que cala hondo de ellos, porque yo hago cine para el mundo, no para Chile y ellos no son famosos para el resto”, explicó Maite Alberdi a Revista Ya. Fue el 2018, el mismo año en que el periodista hizo pública su enfermedad, cuando se inició el rodaje. Era la primera vez que Maite Alberdi tenía como protagonistas a dos personas mediáticas: por un lado a Paulina Urrutia, una destacada actriz y ex Ministra de Cultura, y por el otro a Augusto Góngora, quien por años se dedicó a reconstruir la memoria de Chile en dictadura. Pero ¿Qué tenía esta historia que fuera universal? La respuesta es simple: el amor. Esta película no es sobre el Alzheimer ni el avance de esta enfermedad, es sobre el amor y queda claro en casi 1 hora y media. “No hay una sola forma de ser pareja, ellos rompen todos los estereotipos, nunca vi un amor así en mi vida”, relata Maite Alberdi. “Si te cuento la película, piensas ´que susto, pierde la memoria´, pero para mí no se trata de susto, es entender cómo abordas las relaciones”. La grabación se extendió hasta 2022, pasó por la pandemia y eso llevó a que Paulina Urrutia tomara la cámara y empezara a registrar lo que ocurría en el confinamiento. Un hito que pese a haber podido detener la producción, agregó uno de los valores más importantes de esta cinta: la intimidad. En esa hora y media, “La Memoria Infinita” logra traspasar la pantalla, envuelve al espectador y lo involucra en el profundo amor de esta pareja, pero también en la alegría, en la tristeza y en el desgarro. “La Memoria Infinita” no es una película liviana, más bien está cargada de emocionalidad. Si bien en “El Agente Topo” se reconocen varios tintes de comedia, en este documental la ironía se entrelazan con el drama. Es de esas películas que nos dejan pensando, que nos hacen reflexionar sobre la importancia que le damos a ciertos aspectos de la vida, las relaciones, el amor incondicional por el otro, la forma de comunicarnos, la búsqueda de nuevos canales y la reconstrucción de la memoria. Algo tan importante, a 50 años del golpe de Estado. “Creo que en esta película sí hay memoria. Augusto llora por la muerte de uno de sus amigos y, no haré spoiler, pero hay un momento en que una frase que dice, nos dejó claro que ahí debía terminar la película, porque estaba relacionado a su identidad. Y yo no puedo seguir grabando a alguien que siente que su identidad ya no está”. Pasado, presente y futuro A diferencia de sus otros largometrajes (“La Once”, “Los Niños”, entre otros), esta es la primera vez que Maite Alberdi utiliza imágenes de archivo. Se puede ver parte del trabajo de Paulina Urrutia y Augusto Góngora, además de sus registros personales. Este recurso funciona perfectamente para contextualizar a los personajes en lugares donde son desconocidos. Les da universalidad y cercanía, no por nada en enero se llevó el Gran Premio del Jurado en el festival Sundance de Estados Unidos. Y si bien Maite Alberdi ha reconocido que “no todas las películas llegan al mismo lugar”, “La Memoria Infinita” podría llevarla nuevamente a los Oscar. Hoy es una de las cartas para representar a Chile en la Academia, cuenta con la distribución internacional de MTV Documentary Films y ya se estrenó de forma comercial en Estados Unidos el 11 de agosto. Un escenario muy distinto al que tuvo “El Agente Topo” durante la pandemia, donde prácticamente todo funcionó de forma online. El próximo 24 de agosto, será el turno de Chile. Un estreno que sin duda rendirá homenaje a Augusto Góngora, a 3 meses de su muerte. “¿Y Góngora pudo ver la película? No, cuando terminamos ya no estaba consciente, no tenía sentido exponerlo a ese estímulo. La Paulina le contaba y él reaccionaba. Sus amigos me dicen que le habría encantado”, concluye Maite
Hace 8 años, la vida de Paulina Urrutia y Augusto Góngora cambió para siempre. El alzheimer se hacía presente, marcando un antes y un después en esta historia de amor que comenzó hace más de 25 años. Esa compañía, el cuidado, la trayectoria profesional y el amor incondicional, es lo que resume el teaser de “La Memoria Infinita”; poco más de 40 segundos del nuevo documental de Maite Alberdi. “Lo importante es no te olvides de mí”, le pide Paulina Urrutia a Augusto Góngora. Un conmovedor adelanto de esta cinta que llegará a los cines chilenos y norteamericanos en agosto, luego de haber sido aclamada en festivales como Sundance y Berlín. “En un relato sobre el recuerdo individual y colectivo, Augusto, quien fuera un destacado periodista cultural de la televisión chilena, y Paulina, reconocida actriz y ex ministra de cultura, dialogan entre la reconstrucción de la memoria e identidad, y a la vez mantienen vivo ese amor cómplice inquebrantable”, explica el comunicado de este adelanto. “Me has regalado tantas cosas maravillosas”, le confiesa Augusto Góngora a Paulina Urrutia. Un largometraje íntimo, que registró el día a día de la pareja, el apoyo, el humor, el desafío de reinventar la forma de relacionarse entre ellos y con los otros. Puedes ver un adelanto de “La Memoria Infinita”, a continuación.
Si hay películas que deberían estar en todas las premiaciones, esta es una de ellas. Estrenada en 2021, “El ciego que no quería ver Titanic” será una de las apuestas que traerá el Mes de la Red de Salas de Cine y el Festival de Cine Europeo, antes de su estreno comercial el próximo 29 de junio. Grabada casi por completo con un solo actor en primer plano, este drama finlandés del director Temy Nikki, nos sumerge en la vida íntima de Jaakko : un hombre con esclerosis múltiple que, además de estar paralizado de la cintura hacia abajo, quedó ciego. Enclaustrado en su propio hogar, Jaakko ha sostenido conversaciones telefónicas con Sirpa, una amiga que no conoce y que también lidia con una grave enfermedad. Seducidos ambos por el gusto por el cine, Jaakko decide dejar su hogar e ir a ver a Sirpa, luego de recibir una grave noticia sobre su estado. Es aquí cuando comienza el conflicto. Además de las limitaciones obvias por su enfermedad, Jaakko descubrirá lo más miserable del ser humano: la avaricia, la delincuencia sin pudor, la discriminación. Casi como el Titanic chocando constantemente contra el iceberg, esta cinta nos somete a una experiencia intensa, de rabia, frustración e indignación; pero también nos muestra el lado resiliente del ser humano, el que a pesar de toda la adversidad, puede seguir en pie. Premiada por el público en Venecia, “El ciego que no quería ver Titanic” tendrá funciones gratuitas por el Mes de la Red de Salas de Cine desde el 15 al 22 de junio, en Antofagasta, Santiago, Coyhaique, Puerto Montt, Arica, Los Andes, San Antonio y Valdivia; y por el Festival de Cine Europeo el 16 de junio en la Universidad de Los Andes y el 27 en la Universidad de Chile. Una oportunidad única para ver este tipo de títulos, que difícilmente llegan a nuestro país como estrenos masivos en salas comerciales.
A comienzos de la década del 2000, Alejandro Amenábar nos mostraba a través del terror el drama de una mujer que, a la espera de su marido de la guerra, terminó asesinando a sus dos hijos en una solitaria mansión en la isla de Jersey. Consumida por el aislamiento, debido a una limitante enfermedad de sus hijos, la historia de esta mujer y su familia en “Los Otros” nos volvió a demostrar que este género puede ir más allá de un mero producto comercial. “Siempre le he tenido miedo a las películas de terror. Quizás por eso me interesa tanto contar historias sobre miedo, porque tengo una imaginación muy fuerte. Cuando vi Los Otros, de Alejandro Amenábar, esa fue la película que me abrió los ojos”, explica Hanna Berghold, directora de “Cría Siniestra”. “Aunque siempre había pensado que no quería ver películas de terror, vi cómo se puede contar una historia dramática en un género fantástico. Eso es algo que realmente queríamos hacer en esta película: contar una historia dramática a través del terror”, señala la realizadora; sin embargo, la vara era alta. Premiada en el festival de Sitges, en la categoría “Mejores efectos especiales”, esta cinta finlandesa -estrenada en 2022 - llegará el próximo 18 de mayo a los cines chilenos. Una oferta ideal para los amantes del horror, lo sobrenatural y las historias retorcidas, que tiene como eje principal la relación de una madre, obsesionada con mostrar una vida perfecta a través de las redes sociales, y su hija, una adolescente sometida a sus ambiciones. “Lo que realmente quería mostrar es la relación madre-hija, donde la madre ve a la hija como algo que le pertenece, para que persiga sus ambiciones y algunos sueños incumplidos”. Ambientada en un lujoso barrio finlandés, la película comienza mostrándonos a una familia perfecta, en su barrio perfecto, viviendo una vida perfecta; sin embargo, nos deja en claro que se trata de una burda fachada de esta matriarca. Es en este contexto cuando su hija Tinja comienza a revelarse. Luego de encontrar un misterioso huevo cerca de su hogar, Tinja decide cuidarlo convencida que en su interior existe vida. El resultado es predecible: un monstruo que poco a poco comienza a tomar su forma, navegando a su lado más siniestro y retorcido. La historia que nos cuenta Hanna Berghold, termina siendo una metáfora del crecimiento, emancipación y enfrentamiento de esta adolescente, dejándonos la interrogante: ¿Quién es realmente el monstruo? “Cría Siniestra” es una película que dentro de sus márgenes cumple con lo prometido, sin inflar una trama que fácilmente podría caer en una cinta más del terror comercial. No por nada ha sido elogiada por diversos medios alrededor del mundo, como Variety y Empire. ¿Logra “Cría Siniestra” igualar la vara que dejó “Los Otros”? Si bien su propósito nunca fue ese, la respuesta es no, pero es un buen ejemplo del camino que han sembrado estos referentes.
Los últimos meses han sido caóticos para Pascuala Ilabaca, una verdadera odisea como ella misma confiesa en su regreso a los escenarios tras las cuarentenas. “Logramos recuperar algunos de esos shows (que se habían caído por la pandemia) e hicimos una gira de 30 conciertos, que fue realmente una odisea, porque haber juntado tantas presentaciones en una misma gira, fue una locura. La voz dio y todo el cuerpo, pero igual fue súper agotador”. Agotador, pero estimulante a la vez, nos confiesa. Hizo un tour por Estados Unidos, Europa y Canadá, se presentó en el Festival de Jazz de Montreal ante más de 25 mil personas, el más importante en su género a nivel mundial. “Pudimos compartir con bandas que habíamos estado escuchando durante todo el año y verlos en vivo, conocerlos, eso es bien interesante para cualquiera que busque y persiga salir del país. El contacto que uno pueda hacer con otros artistas, es súper importante” , cuenta a En Palco Pascuala Ilabaca. Y pese a que su agenda no para, el próximo 27 de abril estrenará “Alegriste”, su nuevo EP del que por estos días presenta “Estocolmo”, el single que ya nos adelanta un sonido más rockero. Un poco más alejada de la música de raíz, Pascuala nos lleva a reflexionar sobre lo que realmente queremos y lo que hacemos por conseguirlo; sobre las frustraciones, el arriesgarse y lo que ello implica: ganar o perder. “El EP Alegriste es bien bipolar, como su nombre. Habla mucho de las frustraciones y también de los afectos; hay canciones muy íntimas, muy tiernas. Hay una canción que le escribí a mi gata para hacerla dormir; y también hay otras como Estocolmo, que son más densas, que hablan del manejo de las frustraciones, de cómo estamos secuestrados también por los propios límites que nos ponemos a nosotros mismos”, adelanta Pascuala Ilabaca. El Síndrome de Estocolmo “ Cómo quieres que se arregle el mundo, si tú no quieres arriesgar nada de nada”, es lo que repite una y otra vez la artista en “Estocolmo”, la canción titulada con el mismo nombre del síndrome que lleva a una víctima a desarrollar afecto positivo hacia su victimario. “El dinero podría ser nuestro secuestrador del cual estamos enamorados, pero también hay un autosecuestro, que es la estructura mental, rígida que cada uno va construyendo acerca de quién es, del rol que cumple en su familia, en su entorno” , explica la cantante y compositora chilena. “Qué podemos hacer realmente para cambiar algo que no nos gusta, si es que seguimos amarrados a la misma estructura mental, que nos hace resolver los problemas de la misma manera una y otra vez. Yo creo que sí podemos cambiar, pero para eso tenemos que pensar desde adentro que sí se puede” . Una intervención textil con las mismas prendas que la gente donó para las personas afectadas en los incendios de Valparaíso, pero que estaban inutilizables, es lo que también se puede ver en el videoclip de “Estocolmo”. Parte de una crítica más política y social que fue llevada al centro de Viña del Mar y a la zona del incendio. “Fue fuerte hacer esa instalación, porque al final como llevamos la ropa misma, que era la ropa real que la gente había donado, a la calle real e interactuar con las personas reales que estaban ahí comprando, pasó de ser un rodaje de videoclip a una acción de arte bien intensa y fuerte”. Esto es parte de los casi 5 minutos de “Estocolmo” , que ya alcanza más de 11 mil visualizaciones en Youtube. Un adelanto del EP “Alegriste”, que se suma a una serie de conciertos, incluida una gira por Estados Unidos, que mantiene ansiosa y expectante a la artista nacional. Revisa a continuación el videoclip “Estocolmo”, disfrútalo.