En este melodrama romántico,Beso de Tres explora lo complejo que puede ser encontrar el amor y asumir las responsabilidades que surgen en la adultez joven. Ese momento en que dejar de jugar se vuelve inevitable, en que ceder, conversar y comprometerse en un proyecto común puede traer alegrías, heridas y también sorpresas inesperadas. La historia sigue a Connor ( Jonah Hauer-King), un joven que siente una fuerte atracción por Olivia ( Zoey Deutch, también productora del filme), una ex compañera de trabajo que sigue atendiendo en el bar donde se conocieron. Olivia es un espíritu libre que no quiere amarrarse a nadie; aunque ambos ya compartieron una noche de pasión, para ella fue algo pasajero. Frustrado por los constantes desplantes de Olivia, Connor se acerca a una tímida joven llamada Jenny ( Ruby Cruz), a quien acaban de plantar. Entre ambos surge una conexión genuina que no pasa desapercibida: Olivia se aproxima a ellos y, casi sin planearlo, la noche termina convertida en un juego de tres que marcará sus vidas para siempre. Beso de Tres resulta ser más de lo que promete. A pesar de partir como una película discreta, es más inteligente de lo que aparenta, con giros interesantes y actuaciones sólidas. No es una comedia romántica tradicional; tiene una carga dramática importante, especialmente cuando sus protagonistas deben enfrentar la realidad, hacerse responsables de sus actos y asumir decisiones que cambiarán su futuro. Y una aclaración necesaria: no guarda relación alguna con la cinta noventera Threesome, protagonizada por Lara Flynn Boyle, Josh Charles y Stephen Baldwin. Solo comparten un alcance en el título original en inglés. En cines desde el 4 de diciembre.
En este melodrama romántico,Beso de Tres explora lo complejo que puede ser encontrar el amor y asumir las responsabilidades que surgen en la adultez joven. Ese momento en que dejar de jugar se vuelve inevitable, en que ceder, conversar y comprometerse en un proyecto común puede traer alegrías, heridas y también sorpresas inesperadas. La historia sigue a Connor ( Jonah Hauer-King), un joven que siente una fuerte atracción por Olivia ( Zoey Deutch, también productora del filme), una ex compañera de trabajo que sigue atendiendo en el bar donde se conocieron. Olivia es un espíritu libre que no quiere amarrarse a nadie; aunque ambos ya compartieron una noche de pasión, para ella fue algo pasajero. Frustrado por los constantes desplantes de Olivia, Connor se acerca a una tímida joven llamada Jenny ( Ruby Cruz), a quien acaban de plantar. Entre ambos surge una conexión genuina que no pasa desapercibida: Olivia se aproxima a ellos y, casi sin planearlo, la noche termina convertida en un juego de tres que marcará sus vidas para siempre. Beso de Tres resulta ser más de lo que promete. A pesar de partir como una película discreta, es más inteligente de lo que aparenta, con giros interesantes y actuaciones sólidas. No es una comedia romántica tradicional; tiene una carga dramática importante, especialmente cuando sus protagonistas deben enfrentar la realidad, hacerse responsables de sus actos y asumir decisiones que cambiarán su futuro. Y una aclaración necesaria: no guarda relación alguna con la cinta noventera Threesome, protagonizada por Lara Flynn Boyle, Josh Charles y Stephen Baldwin. Solo comparten un alcance en el título original en inglés. En cines desde el 4 de diciembre.