La historia deEl Gran Viaje de tu Vida sigue a Sarah ( Margot Robbie) y David ( Colin Farrell), dos desconocidos que coinciden en una boda realizada en un lugar lejano y que luego se embarcan, casi por accidente, en un particular roadtrip. Sus automóviles arrendados en un bizarro rent-a-car, están equipados con un GPS que parece guiarlos hacia recuerdos ocultos, ubicados tras puertas que se abren a sus pasados. Allí enfrentarán heridas abiertas, temores y anhelos, en un recorrido que mezcla introspección y fantasía. Aunque la idea es atractiva, la ejecución a ratos falla, los diálogos se sienten artificiales, la narrativa avanza de manera lenta y el componente fantástico nunca termina de integrarse del todo. A nivel visual, la película es impecable. La fotografía enmarca con sensibilidad cada paisaje y la puesta en escena refuerza esa sensación de viaje onírico. Sin embargo, la química entre Farrell y Robbie nunca logra sostener la emoción que la trama exige. Más que un vínculo profundo, parecen compartir escenas con corrección, pero sin mayor chispa. En consecuencia, lo que pudo ser un retrato conmovedor de segundas oportunidades en la vida y en el amor se queda en un artificio estético. El Gran Viaje de tu Vida confirma que Kogonada posee un pulso visual admirable, pero aquí se queda atrapado en su propia pretensión. Es una película que intenta ser trascendente, pero termina siendo olvidable: un romance mágico y empalagoso que no logra despegar más allá de sus imágenes bellas. En salas de cine del país desde el 18 de septiembre.
La historia deEl Gran Viaje de tu Vida sigue a Sarah ( Margot Robbie) y David ( Colin Farrell), dos desconocidos que coinciden en una boda realizada en un lugar lejano y que luego se embarcan, casi por accidente, en un particular roadtrip. Sus automóviles arrendados en un bizarro rent-a-car, están equipados con un GPS que parece guiarlos hacia recuerdos ocultos, ubicados tras puertas que se abren a sus pasados. Allí enfrentarán heridas abiertas, temores y anhelos, en un recorrido que mezcla introspección y fantasía. Aunque la idea es atractiva, la ejecución a ratos falla, los diálogos se sienten artificiales, la narrativa avanza de manera lenta y el componente fantástico nunca termina de integrarse del todo. A nivel visual, la película es impecable. La fotografía enmarca con sensibilidad cada paisaje y la puesta en escena refuerza esa sensación de viaje onírico. Sin embargo, la química entre Farrell y Robbie nunca logra sostener la emoción que la trama exige. Más que un vínculo profundo, parecen compartir escenas con corrección, pero sin mayor chispa. En consecuencia, lo que pudo ser un retrato conmovedor de segundas oportunidades en la vida y en el amor se queda en un artificio estético. El Gran Viaje de tu Vida confirma que Kogonada posee un pulso visual admirable, pero aquí se queda atrapado en su propia pretensión. Es una película que intenta ser trascendente, pero termina siendo olvidable: un romance mágico y empalagoso que no logra despegar más allá de sus imágenes bellas. En salas de cine del país desde el 18 de septiembre.