Entrar en una cafetería y sentir el aroma a café y a las medialunas recién horneadas es el mejor perfume para arrancar el día. En Argentina y sobre todo en la provincia de Buenos Aires, ese olorcito es muy común, ya que para los argentinos este es el desayuno de todos los días. En ésta ocasión, estuve en la localidad de Ingeniero Maschwitz, más exactamente en la calle Mendoza. Maschwitz se encuentra a 48 km de la Ciudad autónoma de Buenos Aires, una zona donde se encuentran una gran variedad de lugares para disfrutar de una rica gastronomía, paseos de compras, ferias de artesanos, shows en vivo y mucho más. El lugar elegido para tomar este rico y tradicional desayuno es la Cafetería Pausa, este local cuenta con una gran variedad de cafés y medialunas, tortas y demás exquisiteces para acompañar. Para quienes no les agrada tanto lo dulce en la mañana, también hay una opción salada, se puede probar un pan tostado con jamón y queso, o las medialunas de grasa, o su opción agridulce una medialuna de manteca (dulce) rellena de jamón y queso, pero la gran mayoría de las personas prefieren la opción dulce solamente, las medialunas de manteca, ya que también es más económica. Tomar este típico desayuno cuesta alrededor de entre $900 y $1200 pesos argentinos, o sea entre unos $2.500 y $3.300 CLP. En la capital Federal, existen lugares tradicionales y emblemáticos, que son visita obligada para quienes anden por estas tierras, como el Café Tortoni y Café 33 billares en Avenida de Mayo, y el Café Las Violetas en Avenida Rivadavia, en estos locales además de disfrutar de un típico desayuno, puedes ver la hermosa arquitectura rodeada de muchas historias. Se cree que las medialunas se crearon en Francia, porque fueron los Franceses quienes popularizaron el croissant, pero en realidad las primeras se hornearon en Austria.
Si hay una comida que todo chileno ha probado alguna vez (y la gran mayoría en innumerables ocasiones), es el completo, el más conocido representante de la comida rápida criolla. El completo puede ser parte de un desayuno, de un almuerzo o de una cena. También puede ser el protagonista de un “bajón” tras una tarde en la playa o una larga noche de “carrete”, o de alguna celebración. Este bocadillo podría considerarse una versión más del archiconocido hot dog, pero no, el completo tiene identidad propia que lo hace único, tal como lo comprueban diariamente los extranjeros que visitan nuestro país. El pan es alargado, con el fin de depositar en el una salchicha que se puede acompañar con tomate, palta, mayonesa, chucrut y salsa americana; o de manera alternativa, solo con palta, tomate y mayonesa (el italiano); o solo con mayonesa (el especial)… en fin, las combinaciones son muchas por lo que generalmente, en Chile, encontrarás un apartado de completos en el menú. A elección, se le puede agregar a gusto ají, mostaza y/o kétchup. No hay rincón en Chile donde no se pueda degustar de este bocadillo, y Viña del Mar (a una hora y media de la capital Santiago), reconocida por sus playas, su festival y su reloj de flores, también cuenta con tradicionales fuentes de soda o sandwicherías, en las cuales el completo juega un rol importante. El primer lugar que visitamos es “El Guatón”, con más de 35 años de experiencia. Hoy cuenta con varios locales en Viña, Valparaíso y Quilpué. Fuimos al de Avenida Valparaíso n° 308.Ofrece un completo grande, con una salchicha de muy buena calidad, que pienso, es lo que más destaca de su oferta. El resto, normal (y lamentablemente, el pan estaba frío). Nuestra segunda opción fue el “África”, que nos entrega sus ricos completos hace más de 60 años. Nació como “El León”, para posteriormente adoptar el nombre del continente, muy had-hoc con su decoración con animales mecánicos autóctonos. Hoy se encuentra en Avenida Valparaíso n° 324, y si bien el completo es de un tamaño normal, no gigante, el pan estaba calentito, y destaca la calidad de sus ingredientes, salvo la palta que lamentablemente no estaba al nivel del resto. La siguiente parada fue el “Sibarítico”, una pequeña sandwichería ubicada en 5 norte casi esquina Avenida San Martín, que ya lleva más de 32 años ofreciendo sus particulares completos, que destacan por su monumental tamaño y la gran cantidad de cada uno de sus ingredientes. Nos presentan un completo con una salchicha y media en su interior con harta palta y mayonesa, quizás no tanta como antaño, pero sigue siendo un bocado llenador. Finalmente, nos dirigimos a uno delos tantos locales del “Cevasco”, el que está situado en 6 Oriente n° 1115. En esta fuente de soda, fundada en 1977, puedes elegir entre un completo normal y otro gigante. La calidad de los ingredientes y la salchicha están más que bien, destacando el sabor de su mayonesa casera. Disfrutamos de cada uno de los completos. Quizás el punto más bajo de todos, considerando que los hemos probado por años, es la calidad y cantidad de la palta. Pero en términos generales, recomiendo cualquiera de los cuatro lugares para conocer y disfrutar en Viña del Mar del chilenísimo completo. Para ver nuestra experiencia completa, te invitamos a ver un nuevo episodio de En Palco Condimenta en el siguiente video.
Monreale es una ciudad muy cercana a Palermo. Es una de las escapadas más populares para aquellos que visitan la capital siciliana, especialmente por su principal atracción: el Duomo de Monreale. Este templo católico construido en la segunda mitad del siglo XII por encargo del rey Normando Guillermo II el Bueno, es considerado una de las más bellas iglesias del Cristianismo, exponente fiel de la más perfecta mezcla de los estilos arquitectónicos y artísticos árabe, normando y bizantino. El Duomo de Monreale es un edificio que destaca por sus espectaculares mosaicos en los cuales se utilizaron aproximadamente dos toneladas de oro. En ellos se pueden apreciar numerosos pasajes bíblicos, tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, pero lo que se roba todas las miradas (y fotografías) es el imponente Cristo Pantocrátor de su ábside (por encima del altar). Inmediatamente al entrar a esta catedral, la vista se dirige hacia este Cristo hierático, severo, grandioso, todo poderoso, con los brazos abiertos portando las Sagradas Escrituras. El Duomo es visitado por cientos de personas diariamente (es considerado Patrimonio de la Humanidad), y el ingreso es gratuito, pero puedes adquirir también la entrada para visitar 4 atracciones adicionales que también forman parte del principal complejo religioso de la ciudad. En primer lugar, la Capilla del Crucifijo, también conocida como Capilla Ruano, en honor al arzobispo español Juan Ruano. Esta se encuentra dentro del Duomo, en su transepto izquierdo. Fue construida a fines del siglo XVII y es una excelente obra para contemplar y disfrutar del llamado barroco siciliano, la variante isleña del conocido estilo; al lado opuesto de la catedral está la entrada al Museo Diocesano, el cual en 3 niveles muestra una serie de objetos religiosos medievales, modernos y contemporáneos; tras la visita al museo, y volviendo al Duomo, puedes entrar a las escaleras que llevan a sus terrazas, obteniendo en ellas maravillosas vistas del vecino monasterio benedictino, de la Cuenca de Oro (en la cual se encuentra Palermo), y de la ciudad de Monreale; por último, saliendo del Duomo hacia la vecina plaza Guglielmo II, encontrarás la puerta del Monasterio de Santa Maria la Nuova, edificio de la congregación de los Benedictinos también del siglo XII, cuyo claustro cuenta con bellísimos arcos, columnas y capiteles que dan cuenta de la belleza del estilo árabe-normando. Pero Monreale es un poco más que su famosísima catedral, es una ciudad de aproximadamente 40.000 personas también reconocida como la ciudad de la cerámica y de los mosaicos, existiendo numerosos talleres en donde se continua con estas artesanías. Además cuenta con una buena oferta gastronómica y tradicionales panaderías con exquisiteces saladas y dulces tradicionales. Para llegar a Monreale y recorrer sus calles, plazas y apreciar sus pintorescas casas y sus floridos balcones, desde Palermo se puede tomar el autobús número 389 en las cercanías de la Plaza de la Independencia, el cual tras alrededor de 20 minutos te dejará en la entrada de Monreale, a solo 5 minutos a pie de la Plaza Vittorio Emanuele, a un costado del Duomo. Si quieres ver imágenes de las calles y de la catedral de esta bella ciudad, te invitamos a mirar el video en nuestro canal en Youtube que registra nuestra visita, que está a continuación.
Entrar en una cafetería y sentir el aroma a café y a las medialunas recién horneadas es el mejor perfume para arrancar el día. En Argentina y sobre todo en la provincia de Buenos Aires, ese olorcito es muy común, ya que para los argentinos este es el desayuno de todos los días. En ésta ocasión, estuve en la localidad de Ingeniero Maschwitz, más exactamente en la calle Mendoza. Maschwitz se encuentra a 48 km de la Ciudad autónoma de Buenos Aires, una zona donde se encuentran una gran variedad de lugares para disfrutar de una rica gastronomía, paseos de compras, ferias de artesanos, shows en vivo y mucho más. El lugar elegido para tomar este rico y tradicional desayuno es la Cafetería Pausa, este local cuenta con una gran variedad de cafés y medialunas, tortas y demás exquisiteces para acompañar. Para quienes no les agrada tanto lo dulce en la mañana, también hay una opción salada, se puede probar un pan tostado con jamón y queso, o las medialunas de grasa, o su opción agridulce una medialuna de manteca (dulce) rellena de jamón y queso, pero la gran mayoría de las personas prefieren la opción dulce solamente, las medialunas de manteca, ya que también es más económica. Tomar este típico desayuno cuesta alrededor de entre $900 y $1200 pesos argentinos, o sea entre unos $2.500 y $3.300 CLP. En la capital Federal, existen lugares tradicionales y emblemáticos, que son visita obligada para quienes anden por estas tierras, como el Café Tortoni y Café 33 billares en Avenida de Mayo, y el Café Las Violetas en Avenida Rivadavia, en estos locales además de disfrutar de un típico desayuno, puedes ver la hermosa arquitectura rodeada de muchas historias. Se cree que las medialunas se crearon en Francia, porque fueron los Franceses quienes popularizaron el croissant, pero en realidad las primeras se hornearon en Austria.
Si hay una comida que todo chileno ha probado alguna vez (y la gran mayoría en innumerables ocasiones), es el completo, el más conocido representante de la comida rápida criolla. El completo puede ser parte de un desayuno, de un almuerzo o de una cena. También puede ser el protagonista de un “bajón” tras una tarde en la playa o una larga noche de “carrete”, o de alguna celebración. Este bocadillo podría considerarse una versión más del archiconocido hot dog, pero no, el completo tiene identidad propia que lo hace único, tal como lo comprueban diariamente los extranjeros que visitan nuestro país. El pan es alargado, con el fin de depositar en el una salchicha que se puede acompañar con tomate, palta, mayonesa, chucrut y salsa americana; o de manera alternativa, solo con palta, tomate y mayonesa (el italiano); o solo con mayonesa (el especial)… en fin, las combinaciones son muchas por lo que generalmente, en Chile, encontrarás un apartado de completos en el menú. A elección, se le puede agregar a gusto ají, mostaza y/o kétchup. No hay rincón en Chile donde no se pueda degustar de este bocadillo, y Viña del Mar (a una hora y media de la capital Santiago), reconocida por sus playas, su festival y su reloj de flores, también cuenta con tradicionales fuentes de soda o sandwicherías, en las cuales el completo juega un rol importante. El primer lugar que visitamos es “El Guatón”, con más de 35 años de experiencia. Hoy cuenta con varios locales en Viña, Valparaíso y Quilpué. Fuimos al de Avenida Valparaíso n° 308.Ofrece un completo grande, con una salchicha de muy buena calidad, que pienso, es lo que más destaca de su oferta. El resto, normal (y lamentablemente, el pan estaba frío). Nuestra segunda opción fue el “África”, que nos entrega sus ricos completos hace más de 60 años. Nació como “El León”, para posteriormente adoptar el nombre del continente, muy had-hoc con su decoración con animales mecánicos autóctonos. Hoy se encuentra en Avenida Valparaíso n° 324, y si bien el completo es de un tamaño normal, no gigante, el pan estaba calentito, y destaca la calidad de sus ingredientes, salvo la palta que lamentablemente no estaba al nivel del resto. La siguiente parada fue el “Sibarítico”, una pequeña sandwichería ubicada en 5 norte casi esquina Avenida San Martín, que ya lleva más de 32 años ofreciendo sus particulares completos, que destacan por su monumental tamaño y la gran cantidad de cada uno de sus ingredientes. Nos presentan un completo con una salchicha y media en su interior con harta palta y mayonesa, quizás no tanta como antaño, pero sigue siendo un bocado llenador. Finalmente, nos dirigimos a uno delos tantos locales del “Cevasco”, el que está situado en 6 Oriente n° 1115. En esta fuente de soda, fundada en 1977, puedes elegir entre un completo normal y otro gigante. La calidad de los ingredientes y la salchicha están más que bien, destacando el sabor de su mayonesa casera. Disfrutamos de cada uno de los completos. Quizás el punto más bajo de todos, considerando que los hemos probado por años, es la calidad y cantidad de la palta. Pero en términos generales, recomiendo cualquiera de los cuatro lugares para conocer y disfrutar en Viña del Mar del chilenísimo completo. Para ver nuestra experiencia completa, te invitamos a ver un nuevo episodio de En Palco Condimenta en el siguiente video.
Monreale es una ciudad muy cercana a Palermo. Es una de las escapadas más populares para aquellos que visitan la capital siciliana, especialmente por su principal atracción: el Duomo de Monreale. Este templo católico construido en la segunda mitad del siglo XII por encargo del rey Normando Guillermo II el Bueno, es considerado una de las más bellas iglesias del Cristianismo, exponente fiel de la más perfecta mezcla de los estilos arquitectónicos y artísticos árabe, normando y bizantino. El Duomo de Monreale es un edificio que destaca por sus espectaculares mosaicos en los cuales se utilizaron aproximadamente dos toneladas de oro. En ellos se pueden apreciar numerosos pasajes bíblicos, tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, pero lo que se roba todas las miradas (y fotografías) es el imponente Cristo Pantocrátor de su ábside (por encima del altar). Inmediatamente al entrar a esta catedral, la vista se dirige hacia este Cristo hierático, severo, grandioso, todo poderoso, con los brazos abiertos portando las Sagradas Escrituras. El Duomo es visitado por cientos de personas diariamente (es considerado Patrimonio de la Humanidad), y el ingreso es gratuito, pero puedes adquirir también la entrada para visitar 4 atracciones adicionales que también forman parte del principal complejo religioso de la ciudad. En primer lugar, la Capilla del Crucifijo, también conocida como Capilla Ruano, en honor al arzobispo español Juan Ruano. Esta se encuentra dentro del Duomo, en su transepto izquierdo. Fue construida a fines del siglo XVII y es una excelente obra para contemplar y disfrutar del llamado barroco siciliano, la variante isleña del conocido estilo; al lado opuesto de la catedral está la entrada al Museo Diocesano, el cual en 3 niveles muestra una serie de objetos religiosos medievales, modernos y contemporáneos; tras la visita al museo, y volviendo al Duomo, puedes entrar a las escaleras que llevan a sus terrazas, obteniendo en ellas maravillosas vistas del vecino monasterio benedictino, de la Cuenca de Oro (en la cual se encuentra Palermo), y de la ciudad de Monreale; por último, saliendo del Duomo hacia la vecina plaza Guglielmo II, encontrarás la puerta del Monasterio de Santa Maria la Nuova, edificio de la congregación de los Benedictinos también del siglo XII, cuyo claustro cuenta con bellísimos arcos, columnas y capiteles que dan cuenta de la belleza del estilo árabe-normando. Pero Monreale es un poco más que su famosísima catedral, es una ciudad de aproximadamente 40.000 personas también reconocida como la ciudad de la cerámica y de los mosaicos, existiendo numerosos talleres en donde se continua con estas artesanías. Además cuenta con una buena oferta gastronómica y tradicionales panaderías con exquisiteces saladas y dulces tradicionales. Para llegar a Monreale y recorrer sus calles, plazas y apreciar sus pintorescas casas y sus floridos balcones, desde Palermo se puede tomar el autobús número 389 en las cercanías de la Plaza de la Independencia, el cual tras alrededor de 20 minutos te dejará en la entrada de Monreale, a solo 5 minutos a pie de la Plaza Vittorio Emanuele, a un costado del Duomo. Si quieres ver imágenes de las calles y de la catedral de esta bella ciudad, te invitamos a mirar el video en nuestro canal en Youtube que registra nuestra visita, que está a continuación.