Fue la gran diva italiana que hizo explotar la cultura kitsch. En 78 años, Raffaella Carrá no sólo se convirtió en cantante, actriz y coreógrafa, sino también se transformó en un ícono que revolucionó a la sociedad conservadora de la década de los setenta y ochenta. Con una carrera que comenzó cuando apenas tenía 9 años, la mujer detrás de “Hay Que Venir al Sur” falleció este lunes.

“Raffaella nos ha dejado. Se fue a un mundo mejor, donde su humanidad, su inconfundible risa y su extraordinario talento brillarán para siempre”, señaló a la agencia Ansa Segio Japino, su pareja. La noticia golpea fuertemente al mundo del espectáculo internacional, que vio a esta diva en lugares como España, Chile e incluso en Hollywood. Según su pareja, Raffaella Carrá falleció este lunes 5 de julio a las 16:20 horas tras una enfermedad que “atacó su cuerpo tan diminuto, pero tan lleno de energía desbordante”.

“Viña es algo que nunca olvidaré”, dijo Raffaella Carrá sobre su paso por el festival en 1982. En ese entonces, con 38 años, la italiana revolucionó a Chile con sus bailes, vestuario y voz; mostró en énfasis su talento como show-woman y se impuso en una edición que tenía a artistas como Raphael y The Police en su parrilla. “Rafaella: Una Actuación Sencillamente Deslumbrante”, tituló un medio de la época.

Fue tanto su éxito, que se convirtió en la primera reina del Festival de Viña. Aunque en esos años no existía el rito del piscinazo ni las transmisiones en directo, la italiana recibió la corona de manos del alcalde Edmundo Crespo. “Te digo la verdad, esa vez tuve una impresión grandísima por la cantidad de gente. ¡Había espectadores arriba de los árboles! Eran miles y miles. Recuerdo muy bien que en esa presentación lo pasé bomba”, recordó Rafaella Carrá en una entrevista con El Mercurio en 2018.

A los 9 años, participó en la película “Tormento Del Passato”; en la década de los 60’, trabajó en Hollywood, y en 1970 publicó su primer disco. En total, lanzó más de 20 trabajos musicales y participó en más de 30 programas de televisión, entre ellos, The Voice, Saturday Night Live y Eurovisión. En el cine, participó en 40 producciones, como “My Heart Goes Boom!” y “Bárbara”.

Según medios internacionales “en sus últimas disposiciones, Raffaella pidió un simple ataúd de madera sin terminar y una urna para guardar sus cenizas”. Es el adiós a esta diva italiana, que se despide como una de las grandes leyendas de la cultura pop a nivel internacional. La voz que seguirá resonando en cuanto karaoke exista: de “Caliente Caliente” a “Fiesta”.