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La Pasión de las Mujeres Milet
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12 de julio de 2023

Equipo En Palco
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Conversamos con Andrea Amosson sobre su nueva publicación “La Pasión de las Mujeres Milet”

El libro de la autora chilena está disponible en formato físico y en ebook.

Nacida en la ciudad de Antofagasta, ha vivido en diferentes países, y hoy lleva más de una década radicada con su familia en Texas, Estados Unidos. Todos estos cambios han influido la vida y la obra de Andrea Amosson, premiada escritora chilena y periodista, quien ha cautivado al público, en especial con sus anteriores publicaciones de corte histórico, en la que las mujeres de carácter y transgresoras son las protagonistas. 

En “La Pasión de las Mujeres Milet”, ambientada a comienzos del siglo XX, la escritora se vuelca al romance, en donde un linaje de mujeres de carácter, criadas entre Francia y Chile, se revelan a las tradiciones para forjar su propio destino y encontrar el amor. Una entretenida novela que retrata una época.

Conversamos con la escritora sobre su nuevo libro, su proceso creativo y más.


¿Cómo nace la inspiración para hacer este libro? 

Este proceso fue entretenido en el sentido de que partió como suelen partir mis procesos, que es una imagen. Se me aparecen estas dos gemelas y yo digo, ¿y quiénes son estas chiquillas? Porque eran jovencitas, eran niñitas cuando yo las vi, deben haber tenido como 9 años, y luego a mí me encanta visitar las ferias de antigüedades donde yo vivo en Dallas, en Texas, entonces, entré a una de estas galerías y de pronto en la pared veo dos cuadros ovalados que está una frente del otro, y son gemelas. Como que sentí una conexión ahí, dije, no serán estas las que se me aparecen a mí, y empecé a dejar que se desarrollan los personajes hasta que empiezan a aparecer las tías, las abuelas, las madres, las parientes lejanas y me doy cuenta de que se trata de toda una familia de mujeres, una saga de familia de mujeres donde ellas están buscando su camino, sus opciones, sus identidades, también. Imagínate ser gemelas y de pronto una de ellas se enferma, ¿Y qué pasa con la otra? ¿Cómo se diferencian? Se diferencian en lo que falta, se unen en lo que todavía es en común... Ese tipo de inquietud empezó a surgir en mí y, así, después de unos cuántos meses el resultado es "La Pasión de las Mujeres Millet".


¿A qué te refieres con que aparecen en tu cabeza? Tú vas viendo cómo se ven o cómo hablan los personajes, ¿Cómo es eso? 

Fíjate que es todo lo que acabas de mencionar. Esta es una pregunta importante, porque cuando la gente escucha de buenas a primeras que estoy viendo a estos personajes, y puede sonar muy extraño, pero en mi caso y yo sé que también el caso de otros escritores y escritoras. Yo creo que hay una imaginación muy activa, por supuesto, entonces realmente veo las visualizo, aparecen en mi en mi mente y de a poquito, a veces, empiezan a hablar. A veces es la voz primero, después viene la imagen. En el caso de esta novela eran la imagen primero y después escuché la voz de la narradora, que termina también estando involucrada en la historia, y el proceso bien orgánico de ver que es la historia que quieren contar, qué es lo que quieren compartir y yo de alguna manera acompañar en el proceso de esta creación, y después con la cabeza fría viene la etapa de la edición.Pero la primera parte es muy intuitiva, donde sí las escucho, las veo, siento que me acompañan, y en todo ese proceso de dejarlas crecer. Pienso que se beneficia la obra al final, porque me han dicho las lectoras y los lectores que pueden sentir que son como personajes reales que te los podrías cruzar en la calle en cualquier momento.


Y desde esa primera aparición a cuando te sientas a escribir, ¿Cuánto tiempo puede pasar o en el caso de este libro cuánto tiempo pasó? 

 Pasaron aproximadamente 12 meses, donde estuve tomando muchas notas a mano, estuve anotando en todas partes, en todos los papelitos que pudiera encontrar, incluso escribía algo en algunos vidrios, en los espejos, porque venían ideas, imágenes, sensaciones en cualquier momento y no tenía tiempo de correr a como al espacio de escritura, entonces tomaba cualquier plumón de esos de pizarra blanca y dejaba ahí una palabra, una frase que luego yo iba a retomar. Yo sabía que luego la iba a retomar. Y también pedía que no me borrará la la pizarra a mi familia, que no fueran a borrar ahí, porque no había tomado fotos de esos apuntes, entonces a veces también estaba un poquito preocupada por eso. Y luego vino la etapa de la escritura, que fue muy concentrada, porque yo había estado desarrollando en mi mente, escribiendo mucho en la mente, la historia, las tramas, los personajes. La cosa fue que cuando estuve lista y preparada me senté a escribir, de manera muy intensa, por muchas horas al día, de lunes a domingo, eso yo creo que ha sido una de las etapas más intensivas de escritura que he tenido, donde realmente todo era las Milet.Incluso lo que comía. Trataba de ir a unas panaderías francesas que hay cerca de mi casa en Dallas y buscando las baguettes, las madeleine, todo ese tipo de pastelería francesa y también el vino muy presente, el vino chileno muy presente en la casa. Vas al supermercado, lo ves, entonces todo eso contribuye también a la intensidad de la escritura.


Esta es una novela de época de comienzos del siglo 20. En general, tú haces novelas históricas, ¿Cómo es el proceso de investigación? Por un lado, está la creación de estos personajes y también los pequeños detalles, porque este libro en particular tiene muchos detalles. ¿Cómo te documentas para complementar esta historia que está en tu cabeza? 

Es paulatina la documentación, no es que yo haga la investigación de antemano porque como no sé viene exactamente, para dónde va la historia en este proceso orgánico que me caracteriza, prefiero esperar hasta que saber que necesito, por ejemplo, el dato de la torta del pastel Saint Honoré y ahí decía, quién lo inventó, en qué año lo inventaron, cuáles son las recetas, los ingredientes. Porque claro, tú dices bien, estamos a principios de 1900 y a lo mejor habían algunos pasteles que todavía no existían. Los hornos, por ejemplo, que eran de carbón de leña, no eran a gas en algunas partes, entonces, había que tomarlo en consideración y fui investigando, mediante, por supuesto, el internet, que me sirve mucho. Uso memoria chilena, uso los sitios de enciclopedias, uso mucho la enciclopedia británica, también YouTube en términos de los videos que hacen con respecto a los vestuarios, hay varios videos interesantes que dicen verdad o mentira si realmente se vestían así o no. Cuando hay análisis, por ejemplo, de la serie Downtown Abbey para ver si son correctos desde el punto de vista de esto.


La entrevista completa con Andrea Amosson la puedes revisar en el siguiente video.


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